¡Qué ganas tenía de que el Orbit G2 llegara a España! Pues en Septiembre de 2010 ya lo tenemos aquí. El carrito es rrraro rrraro, que diría Papuchi, y original es un rato. En Estados Unidos hay quien piensa que es un auténtico horror y que se asemeja a un instrumento médico (sic) y quienes por el contrario opinan que es de lo más trendy. En la foto (de Celebrity Babies) vemos a Sarah Michelle Gellar paseando a su bebé en uno. También hemos podido ver a Kelly Rutherford de Gossip Girl que tiene otro.
¿Qué os parece? A mí (llamadme rara) su estética me gusta. Ahora me diréis no que me ponga gafas (que ya las llevo) sino que me las gradue bien. Y es que el Orbit es un cochecito cuya estética no se asemeja a ninguno que hayamos visto hasta la fecha. Pero bueno, también era raro Bugaboo, y ahí lo tenéis… todo un superventas en España pese a su precio.
Viene de Estados Unidos y se precian de ser respetuosos con el medioambiente. El Orbit se llama así por su característica base sobre la que se fijan silla, capazo y grupo cero en forma de círculo, que permite que puedan girar en todas las direcciones. Hombre, yo el capazo no creo que se pueda mover mucho, francamente, pero la silla puede ir en todas las direcciones. La podéis poner hacia adelante, hacia atrás e incluso mirando hacia los lados. ¿Que para que sirve? Pues servir, servir, lo que se dice servir, el mirar para los lados no para mucho, pero ¿a que mola?. Se llama Orbit SmartHub, es decir «base central inteligente». Ahí es «na».
Entre las ventajas que apuntan están las siguientes, además de la base que es lo más llamativo:
– Manillar que se regula en altura con un botón y que permite ponerlo en cuatro posiciones, entre 97,8 cm y 113 de altura. Esto lo hace un carrito adecuado para las personas altas, pero que también se adapta para las que son un poco más bajitas.

– Plegado sencillo y con una sola mano, pero sin la silla puesta, para quienes esto sea importante.

– Suspensión patentada que absorbe la energía del impacto y resulta muy competitivo en los baches.

– Cesta inferior de almacenaje extraíble y con sistema patentado
– Facilidad para girar el asiento y acoplar o desacoplar los accesorios de la base giratoria con solo tirar de las
palancas de liberación
– Pliegues extensibles patentados Paparazzi Shield™ debajo del protector solar con protección total UV.
– Su textil cumple con el Estándar Oeko-Tex 100 y cuenta con sistema de ventilación único en el mercado.
– Cuenta con una bandeja para snacks en el manillar
En este vídeo podéis ver el funcionamiento del carrito.
Se vende en tres combinaciones de colores: blanco y negro, moca y caqui y dos tonos de rojo.
Pesa 7,7 kg y aguanta hasta 20 kilos, lo que es bastante más de lo habitual (casi todas las sillas aguantan hasta los 15 kilos, alguna hasta los 18 pero es la primera que soporta tanto peso que conozco). Resulta bastante curioso ver a niños montados en ella porque da la sensación de que van colgados… que es exactamente lo mismo que dice mi madre de la Stokke Xplory. A mí me gusta.
Tiene dos asas para llevarse, pero como están unidas por el centro supongo que permitirá conducirse mal que bien con una mano.
Entre los accesorios, me llaman especialmente la atención dos: uno, un balancín que se acopla al capazo y que permite que se balancee. Y dos, unas cestas de la compra que se pueden poner en los laterales con las que se gana mucha capacidad de carga
