Me hace mucha gracia la moda nórdica para niños. En general las marcas suecas, noruegas y de estas latitudes son muy de mi estilo porque están llenas de color (que me encanta) y les pirran las rayas. Y yo veo una raya y me tiro en plancha, igual que mi hija al rosa y a los brillis-brillis. Así que si llevan rayas y son rosas, mi hija y yo podemos llegar a una «entente cordiale».
Hoy voy a hablaros de la marca danesa Smafolk, que es una chulada.
Hombre, a mi me gustan las prendas por separado. Me parecen muy divertidos los pantalones de la foto y me apasiona el estampado de la camiseta que lleva el niño… pero en mi vida se me ocurriría combinarlo. Por lo que cuenta una madre bloguera a la que leo habitualmente (una mamá española en Alemania, un blog que por cierto os recomiendo) estas combinaciones psicodélicas y que hacen un poco de daño a la vista deben ser bastante habituales por el norte de Europa. Aquí en España yo creo que no se nos ocurriría.
Como digo, a mí me encantan las prendas por separado, no las combinaciones que hacen. En general, no sé porqué el tipo de estampados que suelen adornar las prendas me encantan. Se trata de un tipo de ilustración muy minimalista que me recuerda a ilustradoras infantiles que me gustan mucho. Y los colores… son preciosos. Unos más que otros (yo no soy muy de verdes, qué puedo decir) pero en general desprenden mucha alegría. En España donde hay mucho más sol que por esas latitudes no es tan necesario y yo creo que por eso, salvo marcas muy concretas, es complicado encontrar ropa tan colorista.
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