Partamos de la base de que yo no soy una gran fan de la esterilización. Para mi gusto (y es mi opinión personal, que no tiene porqué ser compartida), esterilizamos demasiado. Si se tiene una correcta higiene de los artículos del bebé y se lavan con agua caliente y con jabón, no creo que sea necesario esterilizar nada. Creo que los niños tienen que estar expuestos al mundo real y los tenemos demasiado en una burbuja. Si no, no se explica que de un tiempo a esta parte hayan surgido las alergias de una manera tan generalizada. Por otro lado, cuando eres primeriza esterilizarías todo, pero cuando tienes a tu segundo hijo, vivir obsesionada por esto puede ser complicado de llevar. ¡Cuántas veces nuestros hijos mayores cogen el chupete de los pequeños para jugar, o lo chuperretean ellos mismos y ni nos damos cuenta!
En fin, que yo soy bastante relajada con el tema. Pero bueno, una cosa es lo que haga yo y lo que yo opine y otra cosa es lo que haga el resto, así que si tú crees que es mejor esterilizarlo todo, tal vez te resulte de utilidad este chisme. Se trata de un esterilizador de chupetes que funciona a pilas y que por sus reducidas dimensiones se puede llevar hasta en el bolso.
Utiliza una lámpara UV/03 para esterilizar los chupetes. No es necesario conectarlo a la corriente (con lo que es realmente portátil) sino que utiliza pilas AAA como las de los mandos a distancia para funcionar.
En menos de 6 minutos tenéis vuestro chupete esterilizado completamente. En principio es un esterilizador universal en el que podéis encajar cualquier chupete de todas las marcas. Se vende en rojo, azul y verde.
Lo fabrica Pipila y lo podéis comprar en España en la web de Somos Papás por 29,95 euros.