Hasta hace bien poco no me preocupaba mucho mis sillitas de automóvil: siendo mis hijas de natural cochino, no tenían más que manchas de comida y poco más. Pero ¡ay! resulta que en poco tiempo he tenido que lavar varias veces la funda de la silla de Mencía porque la pobre me ha vomitado en el coche en repetidas ocasiones. No hay cosa más rollo que tener que lavar una silla de coche. Entre lo que supone el desmonte de todo y que generalmente la silla la sueles utilizar todos los días (al menos en mi caso) a mí nunca me venía bien. Pero claro, cuando hay que hacerlo, hay que hacerlo.
Y esto me ha hecho pensar en los padres que por una circunstancia o por otra tienen que lavar las sillitas a menudo ¡qué tostón!
Esto que veis aquí es el protector Close Parent que en España distribuye Yobio. Es un protector universal, que se coloca encima de cualquier sillita de automóvil y nos sirve para protegerla de una manera muy sencilla. Es en la parte inferior donde suelen caer todas la migas y donde, misteriosamente, acaban todas las manchas, al menos en nuestro caso. Alguna vez se manchan los arneses (mis hijas son capaces de todo) pero vamos, es la parte inferior la que más sufre. Así que colocando esto, cuando la cosa esté que dé vergüenza verla (o sea, a los dos días de haberlo puesto), se saca, se lava, y listo. Mucho, mucho, mucho más fácil que desmontar la tapicería de la silla sin lugar a dudas y, sobre todo, no te deja inutilizada la silla durante varios días. ¡Porque en mi casa la ropa se seca a velocidad tortuga!
Se vende en varios colores, algunos más cantosos (mis favoritos) y otros más sobrios como el gris. Vienen con un absorbente que podemos retirar sin más en el caso de que haya recogido líquidos y que es especialmente útil para el momento en el que estamos quitándoles el pañal a los niños. Si hay una fuga, ¡no hay problema!
Podéis comprarlo en Yobio.