Porque yo lo valgo

La verdad es que esto de ser bloguera es genial. Para mí, que soy de natural extravertido, es fantástico porque la verdad es que conozco a gente realmente maja. Mis compañeras de trabajo se parten de risa porque dicen que a mí todo el mundo me cae bien, ¡pero no es (del todo) cierto!. El caso es que con Mariona de Zonaregalo estuve echándome unas buenas risas pensando cómo podíamos colaborar … muchas carcajadas más tarde me dijo que me regalaba una experiencia pero ¡nada de para niños! ¡Para mí! 

Y es que yo no creo que sea la única que cuando tiene hijos se olvida de sí misma. Vale, para que nos vamos a engañar, yo no me he maquillado a diario en mi vida, ni llevo tacones, ni por supuesto acudía a tratamientos de belleza con regularidad. No puedo achacar el lamentable estado de mi pelo a mis hijas. Pero si que es verdad que desde que tengo hijas, ir a comer con mis amigas requiere una logística mucho mayor que cuando no las tenía y hacer, en general, casi cualquier cosa. No me importa especialmente porque me gusta ser madre y disfruto con mis hijas, pero sí que es verdad que cuando puedo hacer cualquiera de las cosas que hacía antes de tener a mis niñas lo disfruto mucho más.

¡Estaba con mi cajita para un tratamiento facial de chocolate feliz de la vida!. Dos meses. Dos meses en los que no fui capaz de encontrar una fecha.

¡Así es la vida de una madre!

Y por fin en mis vacaciones conseguí encontrar un hueco para ir. Que queréis que os diga. El chocolate no es lo mejor para mi piel porque después de preguntarle a la chica que me atendió qué cuales eran sus propiedades, además de la de mantener a mis hijas un rato alejadas, resulta que es muy hidratante y yo tengo la piel grasa. Vamos, que la mejor de sus propiedades en mi caso es la de tenerme un rato oyendo musiquita tranquila, tumbada sin prisa, sin twitter, sin redes sociales… PAZ.

Que digan misa. Me da igual tratamiento facial, que masaje, que spa ¡Cómo disfruté! Y que queréis que os diga, si algun otro quiere que pruebe alguna cosa de estas, yo me sacrifico. Busco canguro para las niñas un rato ¡Y a vivir!

(En Zaragoza yo asistí a Puntovital y supermegarrecomendado. Las instalaciones estupendas, la chica que me atendió realmente maja y consiguieron mi objetivo, que no era tener el cutis de Charlize Theron sino relajarme un rato)

Imagen cortesía de Zirconicusso / FreeDigitalPhotos.net