Hace tiempo que quería hacerlas. ¡Las chapas vuelven con más fuerza que nunca! ¡Y si no que se lo digan a mi amiga Sandra! (P.D. Sí, cariño, una de cada llevan tu nombre) En los ochenta eran imprescindibles, se fueron y cada vez vuelven con más fuerza. ¡Y a mí me encantan! Así que me encontré con Camaloon… y no tardé nada en hacerles un pedido con mis chapitas. La idea es utilizarlas para ponerlas en las cositas que hace mi madre porque salen muy bien de precio (sobre todo si las encargas en grandes cantidades)
Estas son mis chapitas de Mamis y Bebés. No me compliqué mucho la vida… el logo y ya está. Pero en Camaloon podéis ser todo lo creativos que queráis, haciendo las chapas completamente a vuestro gusto. No es más caro hacer cada chapa distinta. Lo que pasa que en mi caso no tenía mucho sentido 🙂
Tenéis un montón de tamaños, más grandes, más pequeñas… y también formas. No hace falta hacerlas necesariamente redondas (aunque a mí son las que más me gustan… llamadme clásica): al final se trata de hacer algo adaptado a vuestro motivo. Aquí podéis ver como están acabadas por detrás. Por delante, podéis hacerlas en mate o en brillante. ¡Eso va en gustos! Las mías son mates, por si tenéis curiosidad.
Además de las de Mamis y Bebés hice algunas con el logo circular abreviado, que es el que utilizo como icono. Pero estas son para mí, básicamente.
Yo he acabado encantada con Camaloon así que en cuanto se gasten seguro que encargo más.