La verdad es que, lo creáis o no, un bebé necesita muchas menos cosas de las que nos creemos. Pero muchas, muchas, muchas menos. Nos obsesionamos comprando como si no hubiera un mañana y lo cierto es que hay muchas cosas sin las que podemos vivir.
¿Qué hace falta cuando tienes un recién nacido y qué no? Cada uno te dirá su opinión y no tiene porqué coincidir. Por ejemplo, hay quien al cojín de lactancia no le encuentra el aquel y yo, 9 años más tarde de tener a mi hija tengo tres que usamos a diario, uno cada una. No para dar el pecho que a estas alturas de la película pues como que no, pero sí para dormir y para un montón de cosas. Así que esto que yo os voy a contar es subjetivo del todo. Y no pretende ser de otro modo.

En la habitación
Lo primero que tienes que pensar es cómo quieres dormir que duerman tus hijos. Y segundo, encomendarte a todos los santos para que ellos estén de acuerdo. En mi caso Aldara durmió en su dormitorio desde el primer día, sola, más feliz que Ortiz. Sin un lloro, sin traumas y sin quejas. Mencía no usó la cuna ni una sola vez (¿tendría pinchos?) y colechamos. Vamos, lo que viene siendo que durmió conmigo mucho tiempo. Sin minicuna, directamente a mi lado. Yo no le veo problemas a nada mientras no haya traumas.
Personalmente soy muy fan de las cunas y minicunas de Trama. La minicuna de colecho me tiene loca, porque me parece una preciosidad, algo muy práctico y versátil. Si tu hijo quiere dormir a tu vera, puede hacerlo. Si quieres que duerma en otro sitio, con llevártela con las ruedas es suficiente.
Algunos padres eligen tener minicuna y después cuna. Por lo general nos empeñamos en tener la habitación perfecta cuando nace el bebé, pero si tenemos una minicuna y al bebé en nuestro cuarto podemos tomárnoslo con calma.
Para dormir me encantan los saquitos de bebé tipo Grobag. Mis favoritos eran los de esta marca sin duda. Para comprarlos prestad atención al grosor, que tenéis que elegir en función del frío o calor que haga en vuestro domicilio.
A mí personalmente comprar una habitación con un armario de Liliput no me convence. Prefiero comprar un armario de dimensiones normales y en todo caso cambiar la barra del mismo para que puedan ponerse bien las prendas del bebé y así poderlo aguantar más tiempo. Me ocurre lo mismo con los cambiadores especiales. Creo que es mejor comprar una cómoda normal y corriente y poner encima un cambiador como estos y chispún. Particularmente odio los muebles con bañera, me parecen lo más incómodo del mundo, pero si por alguna razón a ti si que te gustan asegúrate de que posteriormente se pueda quitar y puedas convertirlo en un mueble normal y corriente.
Es útil que tengas una cesta o similares que puedas llevar de un lado a otro con las cosas de tu bebé. Yo te recomiendo que tengas a mano toallitas (o una palangana con una esponja y agua, esto depende de cada uno), suero fisiológico en bote grande con una jeringuilla clavada (mucho más barato que las monodosis) y crema para el culete. No hay que ponerla indiscriminadamente en cada cambio: si está irritado le ponemos y si no no. Si le vamos a bañar en el baño, añadimos una esponja y jabón. El champú, con las melenas que tienen, no hace falta en absoluto.
A mí me resultaban muy útiles los empapadores. Los colocaba encima del cambiador. Salvo que se mancharan, que no era en absoluto lo normal, me duraban mucho tiempo. Me resultaban tan cómodos que solía llevarlos incluso en el carrito porque me gustaban más que los cambiadores portátiles.
El resto de cosas están a otro nivel: depende de como sea nuestro bebé necesitaremos unas u otras. La hamaca es útil para muchos (me gustan la de Nuna o la BabyBjörn), está bien tener un gimnasio donde poder dejar a nuestro bebé para que se entretenga (si cuela, hay otros bebés que pasan), un móvil de cuna lo mismo… Pero como digo, ni son imprescindibles ni todos los bebés disfrutan con ellos. Tampoco me parece útil un intercomunicador, salvo que vivas en una casa descomunal. En mis 85 metros cuadrados no hace falta alguna.
Alimentación
Pues mira, hacen falta muy pocas cosas así de primeras. Olvídate de la trona: pasará mucho tiempo hasta que pueda usarla, ya la comprarás. Lo mismo con las vajillas infantiles ¡pero si queda la mundial!
Si das el pecho puede que te venga bien un sacaleches. Yo nunca me llevé bien con él, en honor a la verdad. Con Aldara no sacaba nada y con Mencía apenas tenía tiempo para sacarme porque siempre la tenía mamando. Cuando necesitaba extraerme leche (sobre todo al principio, con la subida), me resultaba mucho más fácil hacerlo a mano. O sea, ordeñe puro y duro. Si vais a compraros, yo me compraría uno eléctrico. Tuve dos (y buenos) manuales y no me gustaron en absoluto.
Si das biberón también soy partidaria del minimalismo. Compraría un pack de varios biberones y a vivir. No os emocionéis con las tetinas: los niños tienen claras sus preferencias y unas les gustarán y otras no. Si tenéis que comprar online os recomiendo Tutete.com: un sitio orientado al cliente con un surtido gigante. Y buena gente. Que oye, también es un punto a su favor.
Yo no creo necesario el esterilizador, ni el calientabiberones (hay quien sí). Sí que viene bien una escobilla para limpiar biberones y también me gustaban los dosificadores de polvos. Con Aldara llevaba un termo con agua caliente, pero vamos, ni siquiera era específico de bebés. Compré uno para adultos en el Hipercor y tan feliz.
En fin, sobre la marcha. Lo mismo ocurre con los chupetes. Si dais pecho posiblemente no los necesitéis, y de tener que usarlos podéis comprarlos en cualquier sitio ¡será por chupetes!
En serio: no os agobiéis. Hacen falta menos cosas de las que creéis. Palabrita.
2 respuestas a «¿Qué necesito (de verdad) para un recién nacido? En casa»
Y la de cosas que se quedan sin estrenar!!!
A mi me pasaron un esterilizador (ya sabia que no lo iba a usar, agua caliente y jabon), un calientabiberones y una cosa de esas que proyecta luces y musiquitas en el techo… hace exactamente 3 años y 5 meses (me los colocaron antes de que naciese la mayor), que están ocupando sitio en un armario.
La mayor pasaba de los moviles olimpicamente, al pequeño le han gustado un poco mas, pero un poco. Probad con uno baratito, sencillo y si veis que lo entretiene, adelante con los faroles, si no…es un pingo mas que da mucho mal a la hora de hacer la cuna.
Yo también uso empapadores, llevo el cambiador que salía en la bolsa del Jané Muum (por darle un apoyo blandito, mis niños han sido cambiados desde el maletero del coche, hasta en una zona de campo buscando un hueco entre raices) y el empapador encima, que lo mean, a la basura y otro, no abultan, no pesan y oye… si lo manchan no lo llevas sucio encima (Y son mas grandes ^^).
Tampoco soy partidaria de ir cargada con una tonelada de juguetes, me parece innecesario, que jueguen con lo que encuentren, una rama, la tierra del jardin o que den vueltas a la fuente corriendo… bastantes juguetes tienen en casa.
Lo demás, los sucribo todo.
Un ejemplo muy común radica en valerse de citas frases que expresen amor, sentimientos y afecto
cara la otra una parte de y ciertos ejemplos pueden ser No necesito a ninguna otra,
con ella lo tengo todo”, Eres lo mejor que me ha pasado en mi
vida”, Solo en tus brazos soy capaz de despertar el amor” Concédeme
este invierno a fin de que pueda abrazarme mi princesa”.